



Pues quiero aprovechar esta celebración para dedicarle esta publicación a mi mamá, porque sin ella no sería lo que soy (aunque suene a una frasé cliché).
Y aunque son miles de cosas por las cuales debo darle las gracias, voy a hacerlo en esta oportunidad por su ayuda en lo que en un principio comenzó como un hobbie para mi y se ha ido transformando en mi oficio: la repostería.
Gracias por todas las veces que me ayudaste a hornear tortas, a decorar, a hacer galletas, a entregar algún pedido, a buscarme clientes, a quedarte hasta la madrugada conmigo terminando alguna torta para el día siguiente, por darme buenas ideas, acompañarme a comprar ingredientes, a hacer flores, alegrarte conmigo cuando los clientes quedan muy contentos con sus pedidos, y ahora por ser mi colega en este oficio y compartir este hobbie conmigo a distancia.
Te amo mami! eres la mejor.